Dormir bien es un componente vital para nuestra salud y bienestar. El sueño es una de las actividades más importantes de nuestro día pues permite que nuestro cuerpo se recupere y esté listo para un nuevo día. Dormir lo suficiente es esencial para mantenernos saludables, pues es tan importante como el ejercicio regular y una dieta balanceada. Muchas investigaciones demuestran que la falta de sueño tiene efectos negativos sobre nuestras hormonas y función cerebral. Desafortunadamente, hay muchas cosas que pueden interferir con los patrones naturales de sueño.
La calidad del sueño
La calidad del sueño es diferente de la cantidad de sueño. La cantidad de sueño mide cuánto duermes cada noche, siendo unas 7 horas o más lo recomendable. Por otra parte, la calidad del sueño mide qué tan bien duermes. Incluso después de dormir 8 horas o más, puedes despertarte sintiéndote cansado y sin energía. Esto significa que incluso cuando duermes suficientes horas, la calidad de tu descanso no es la ideal.
¿Estás descansando bien por la noche?
Hay algunos indicadores de qué consideramos un descanso saludable. Por ejemplo, poder quedarte dormido poco después de acostarte y dormir toda la noche de forma ininterrumpida. Una noche de sueño de buena calidad te hace sentir descansado, restaurado y con energía al levantarte por la mañana. Los beneficios de descansar bien son muchos. Puede ayudarnos a mejorar la concentración y la productividad, así como a fortalecer el sistema inmunológico. Si quieres dormir mejor, lo importante es mejorar nuestras rutinas para alcanzar una noche de descanso reparador.
¿Cómo mejorar la calidad de tu sueño?
1. Aumenta tu exposición a la luz solar durante el día y reduce las pantallas por la noche.
Nuestros cuerpos tienen un reloj natural conocido como ritmo circadiano. Este afecta el cerebro, el cuerpo y las hormonas, pero además nos ayuda a mantenernos despiertos y le dice a nuestro cuerpo cuándo es hora de dormir. Recibir luz solar natural durante el día nos ayuda a mantener saludable nuestro ritmo circadiano. Por el contrario, la exposición a la luz nocturna nos mantiene alertas impidiendo un sueño reparador. Esto ocurre porque se desequilibran las hormonas, como la melatonina, que nos ayudan a relajarnos y dormir profundamente. Agregar melatonina como suplemento también puede ayudarnos a mejorar la calidad y duración del sueño.
2. Trata de dormir y despertar a la misma hora
El ritmo circadiano de nuestro cuerpo funciona como un ciclo, alineándose con el amanecer y el atardecer. Ser constante con las horas de dormir y despertar, incluso los fines de semana, puede mejorar la calidad de nuestro sueño. Acuéstate y levántate a la misma hora todos los días, seguir un horario de sueño constante entrena a el cerebro para reconocer cuándo es hora de dormir y cuándo es hora de despertar. También es importante reducir las siestas largas durante el día porque pueden confundir nuestro reloj interno, lo que significa que podemos tener dificultades para dormir por la noche.
3.Asegúrate de que tu habitación sea cómoda
Transforma tu dormitorio en un espacio cómodo para dormir. Asegúrate de que la habitación sea silenciosa, oscura, relajante y a una temperatura agradable. Puedes utilizar cortinas opacas o una máquina de ruido blanco para relajar aún más tus sentidos. Otra buena idea es quitar los dispositivos electrónicos como televisores, computadoras y teléfonos inteligentes del dormitorio. Esto ayuda a que nuestro cerebro reconozca nuestra cama como un espacio para descansar.
4. Relájate por la noche con una rutina antes de dormir
Tener una rutina antes de dormir puede ayudarnos a relajarnos y prepararnos para ir a la cama. Las técnicas de relajación como el respirar o meditar antes de acostarse mejoran la calidad de nuestro sueño. Elige actividades que te hagan sentir calmado, como escribir un diario, escuchar música o tomar un baño relajante. Realizar estas actividades en el mismo orden todas las noches nos ayuda a crear una rutina que nos ayudará a conciliar el sueño de forma más rápida.
5. Haz ejercicio por las mañanas
Estar activo durante el día puede ayudarnos a conciliar el sueño más fácilmente. El ejercicio es una de las mejores formas de mejorar su sueño y su salud. Pero, aunque el ejercicio diario es clave para una buena noche de sueño, realizarlo demasiado tarde en el día puede causar problemas para dormir. Esto se debe al efecto estimulante del ejercicio, que aumenta el estado de alerta y hormonas como la adrenalina.
Recuerda que el sueño juega un papel fundamental en nuestra salud. Si queremos sentirnos con energía y descansados, dormir debe ser una prioridad.
¡Incorporar algunos de estos consejos puede ayudarte a lograrlo!
Excelente, voy a seguirlo