Toma una pausa para cuidarte

Este año muchos hemos aprendido la importancia de cuidar nuestra salud física, mental y espiritual. Pero incluso ahora, a muchas personas les cuesta encontrar el tiempo para bajar la velocidad y conectar con ellos mismos. ¿Cuántas veces te has despertado sintiéndote agotada, como si todas las cosas pendientes te hicieran comenzar el día con batería baja? Nuestras mentes tienden a estar constantemente ocupadas con pequeñas tareas; entre el trabajo, la casa, la familia, es natural estresarse y desear algunos minutos de paz. Tomar una pausa es una oportunidad para dejar de hacer cosas por todos los que te rodean y cuidarte a ti mismo.

Pero, ¿cómo tomar un descanso sin sentirse culpable? Hoy en día muchos tenemos la necesidad de ser hiper productivos, donde cada segundo debe invertirse en lograr un objetivo o completar una tarea. A menudo, cuando nos encontramos con un minuto libre, usamos ese tiempo para adelantar trabajo o preocuparnos por las tareas de mañana. Intenta practicar el no hacer nada “productivo”, tu necesidad de descansar y relajarte es tan importante como la necesidad de completar la lista de pendientes. Recuerda que el tiempo dedicado a trabajar en ti misma nunca se desperdicia. Todavía estás logrando algo, pero el enfoque está hacia adentro. Tomar una pausa es una excelente manera de recargar las baterías y sentirte renovado. Además te ayudará a nutrir tu mente, descubrir un lado creativo e incluso aumentar tu productividad.

¿Cómo empezar? Hay algunas actividades que puedes hacer para adquirir el hábito de tomar una pausa y practicar el self-care.

Regálate tiempo

Si constantemente sientes que necesitas un descanso, esto puede ser una señal de que estás descuidando tu relación con la persona más importante en tu vida: ¡tu! Haz una cita contigo misma para hacer algo que disfrutes y anótalo en tu agenda. A veces tendrás que decir "no" a los demás y honrar ese compromiso que hiciste contigo. Ni siquiera tienes que salir de la casa o tomar toda una tarde. Hay espacios "vacíos" en casi todos nuestros días, pequeños momentos de los que puedes reapropiarte. Intenta llegar diez minutos antes para una cita, hacer que tu coffee-break sea un momento de paz o pasear al perro sin tu teléfono. Tomar estos momentos en tu día para estar solo es una manera de acallar el caos del mundo exterior y disfrutar del tiempo contigo misma.

Practica la “Atención plena” o Mindfulness

Respira profundamente, quédate quieta y revisa cómo te sientes; al menos por unos minutos al día. El mindfulness es la práctica de enfocar deliberadamente toda tu atención en el momento actual y aceptarlo sin juzgarlo. Nuestras mentes están tan preocupadas pensando en el pasado o el futuro, que nos cuesta disfrutar el momento que tenemos para nosotros mismos. Tómalo con calma, sal a caminar, disfruta de una taza de té, emociónate como los niños cuando juegan. Por tan solo unos momentos olvídate del teléfono, los correos electrónicos no leídos y las redes sociales. Toma estos minutos para explorar profundamente lo que sientes, cómo te conectas con todo lo que te rodea. Puede ser aterrador dejar de mirar hacia afuera y concentrarse en el interior, pero es una actividad muy gratificante. La atención plena nos ayuda a desarrollar el autoconocimiento y nos enseña cómo cuidar nuestro cuerpo, ver más claramente la solución a un problema o crear algo extraordinario.

Meditación para el alma

Al principio puede parecer extraño sentarse en silencio escuchando tus pensamientos y sentimientos, sin hacer nada más. La meditación es un lugar donde prestas atención a tu respiración mientras permaneces en el momento presente. Piensa en ella como el siguiente paso del mindfulness. Y al igual que en un deporte, esta es una actividad que requiere disciplina y práctica. Practicar la meditación puede reducir nuestros niveles de estrés y brindar beneficios sorprendentes para la salud. También nos ayuda a conectar con otros, mejorar nuestro enfoque y ser más amables con nosotros mismos. Si necesitas ayuda para meditar, puedes usar una aplicación como Headspace o, mi favorita, la experiencia de meditación de 21 días desarrollada por Deepak Chopra y Oprah. Es un viaje hermoso e inspirador el comenzar a comunicarte más contigo mismo.

Aprende a amarte 

¿Con qué frecuencia oímos sobre la importancia de ser amables y compasivos con nosotros mismos y cómo hacerlo? La mayoría de las veces nos enfocamos demasiado en nuestra relación con los demás. No debemos olvidar que todo en nuestras vidas fluye de la relación que tienes contigo mismo, sin embargo, es una de las más complicadas y descuidadas. Aprender a amarte es esencial para lograr el bienestar general al que todos aspiramos. Usa esta pausa para practicar el amor propio y recordarte que eres digno de amor, respeto y compasión. Cuando estés practicando el mindfulness o la meditación, abraza quién eres. Acepta tus experiencias, ya sean buenas o malas, y perdónate por los errores del pasado. Tratarnos con amabilidad y consideración es el punto de de inicio para el self-care.

El poder de la gratitud.

¿Sabías que la gratitud es el atributo personal más asociado con la salud mental? Expresar gratitud nos hace sentir más optimistas en nuestra vida diaria, y puede darnos una mayor capacidad de resiliencia en los momentos difíciles. Esto se debe a que la gratitud es una forma de enfocarte en las cosas buenas que te suceden. Nuestros días rara vez salen según el plan o sin desafíos inesperados. Aprender a apreciar los buenos momentos es una herramienta poderosa que nos permite conectarnos positivamente con el mundo que nos rodea. Piensa o escribe sobre esos momentos en tu día por los que estás agradecido. Podría ser una flor que viste, una conversación agradable con un amigo, una buena taza de café. Tomar un minuto para disfrutar y agradecer las cosas buenas de tu vida es la mejor manera de mejorar tu estado de ánimo.

Si bien puede parecer mucho, la idea es encontrar herramientas que te empoderen y te permitan convertirte en una mejor versión de ti misma. Así como el ejercicio y la dieta balanceada nos ayudan a mantener un cuerpo sano, trabajar en tu salud emocional y espiritual es importante para lograr el bienestar. Todo lo que necesitas para comenzar es una pequeña pausa. Tómate su tiempo y recuerda que el cuidado personal es un viaje, no un destino. Disfruta el tiempo que pasas sola y úsalo para recargar tu cuerpo y tu mente con energía positiva. Trabaja en la relación contigo misma, aprecia la belleza que te rodea y siéntete agradecida por las cosas más pequeñas. Cuando nos sentimos descansados ​​y reabastecidos, podemos lograr lo extraordinario.