¡Ya se acerca una de las mejores épocas del año! Hay muchísima magia en la temporada navideña: el esplendor invierno, los suéteres abrigados, las cenas familiares y el chocolate caliente. Si bien nos encanta todo esto, el cambio en la temperatura puede causar estragos en nuestra piel. En estos meses parece que de la noche a la mañana nuestra piel pasara de estar nutrida y suave a sentirse reseca y agrietada.
Durante esta época del año solemos experimentar cambios drásticos de temperatura y mucho viento. El aire frío afecta la humedad de nuestra piel, provocando que se irrite. Afortunadamente, hay muchas formas de prevenir las causas de la piel seca y mantener nuestra piel hidratada y tersa durante todo el invierno.
Si quieres lucir una piel radiante sin importar la temporada del año, ¡sigue leyendo! Hoy te comparto algunos cambios sencillos en tu rutina que mantendrán tu piel saludable e hidratada aun cuando baja la temperatura.
Adapta tu rutina en invierno
Con el cambio de estación es importante proveer a nuestra piel de hidratación y protección extra. Sim embargo, demasiados cambios nunca son positivos y pueden ocasionar brotes o mayor resequedad. Lo ideal es ajustar nuestra rutina poco a poco, entendiendo las necesidades de la piel y cómo responde a diferentes entornos y productos.
Mantenernos hidratados y tomar muchos líquidos es una de las mejores cosas que podemos hacer para evitar la sequedad. Las investigaciones han demostrado que el consumo de alcohol puede aumentar la inflamación y deshidratar la piel, así que es importante tomarlo en cuenta durante las festividades. Igual podemos incluir en nuestra dieta muchas frutas y verduras de temporada. Las bayas son mis favoritas, ya que son fuentes excepcionales de vitaminas y antioxidantes que la piel necesita para mantenerse saludable en el clima frío.
Cómo rejuvenecer la piel en invierno
Sigue estos cambios simples en nuestra rutina que te ayudarán a rejuvenecer la piel y adaptarla al cambio de temperatura:
Usa un humidificador
En los meses más fríos de invierno, el aire exterior normalmente contiene menos agua y es más seco. Los humidificadores ayudan a proteger nuestra piel cuando estamos en casa al reponer la humedad en el aire. Usa un humidificador en las habitaciones en las que pasas la mayor parte del tiempo, y trata de mantener los niveles de humedad entre el 30 y el 50 por ciento. Una opción extraordinaria es usarlo durante la noche mientras dormimos.
Evita tomar duchas muy calientes
Las duchas largas y llenas de vapor pueden sonar como una gran idea cuando hace frío, pero el agua caliente tiende a resecar la piel. El agua caliente elimina los aceites naturales de nuestra piel y la deja más susceptible a la resequedad. Lo ideal es tomar duchas tibias de 5 a 10 minutos y secar delicadamente la piel para luego aplicar una crema hidratante.
Sé cuidadosa con tus ingredientes de Skincare
Durante el invierno lo mejor es mantenernos alejadas de productos que contienen alcohol y fragancias, ya que tienden a secar la piel. En cambio, podemos buscar productos que estén etiquetados para pieles sensibles, ya que generalmente contienen menos ingredientes irritantes. Opta por skincare con ingredientes nutritivos como ácido hialurónico, ceramidas, aceites naturales (como el aceite de Jojoba) y manteca de karité.
No olvides las manos y pies
La piel de nuestras manos tiene menos glándulas sebáceas y la humedad se escapa rápidamente, lo que hace que nuestras manos sean propensas a las grietas y la irritación. No es suficiente aplicar crema de manos por la mañana, debemos aplicarla constantemente durante el día. Por la noche, podemos aplicar un Body Butter en las manos y pies y luego ponernos guantes y medias de algodón. Para una dosis extra de hidratación, es buena idea usar aceite para cutículas una vez al día.
Agenda un tratamiento facial
La piel en invierno a menudo se ve opaca y sin vida, por lo que es ideal agendar un tratamiento profesional cada cuatro semanas. Un facial con tratamiento exfoliante nos ayuda a eliminar las capas superiores dañadas de la piel y revelar la piel más suave y joven que se encuentra debajo. El microneedling también es una gran opción, ya que ayuda a que nuestro cuerpo a produzca nuevas células de la piel, así como colágeno y elastina.
Si aún después de aplicar estos consejos experimentas resequedad, incomodidad o irritación, es hora de llamar a tu dermatólogo y programar una cita. ¡Espero que estos tips te sean de ayuda para rejuvenecer la piel en invierno!