Cada vez es más común el uso de suplementos para complementar las necesidades nutricionales de nuestro cuerpo y ayudarnos a gozar de buena salud. Para muchas personas, los suplementos pueden ser una forma útil de obtener nutrientes que de otro modo les faltarían y prevenir enfermedades. Sin embargo, muchas veces consumimos suplementos sin saber si realmente son necesarios para nuestro organismo.
El uso de multivitamínicos, minerales y antioxidantes suele estar recomendado para compensar una deficiencia nutricional. Consumirlos sin orientación puede traer más problemas que beneficios, y hay una verdad en la que todos los expertos nutricionales concuerdan: los suplementos no pueden sustituir una buena alimentación. Para mantener un cuerpo sano es fundamental comer de forma balanceada.
Si alguna vez te has preguntado ¿de verdad necesito incluir suplementos en mi dieta? Sigue leyendo, porque hoy te compartimos algunos datos relevantes sobre la alimentación y el uso de suplementos que seguro serán de gran ayuda a la hora de elegir una combinación que se adapte a tus necesidades.
Alimentación saludable
Los micronutrientes son las vitaminas y minerales que se encuentran en los alimentos que nutren nuestro cuerpo y lo ayudan a mantenerse saludable. Estos son esenciales para el funcionamiento del organismo y la salud en general. Las vitaminas y minerales que se obtienen de los alimentos ofrecen numerosas ventajas que los suplementos no pueden darnos, como incluir carotenos, flavonoides y antioxidantes que reducen el riesgo de padecer muchas enfermedades.3 beneficios principales de los alimentos
- Mayor nutrición. Los alimentos contienen gran cantidad de micronutrientes que el organismo necesita. Por su parte los suplementos no tienen la misma complejidad de nutrientes.
- Fibra. Los granos, frutas, verduras y vegetales aportan gran cantidad de fibra, la cual ayuda a regular los procesos digestivos. La fibra alimentaria puede ayudar a reducir el riesgo de padecer diabetes, enfermedades cardíacas, entre otras.
- Antioxidantes y otras sustancias complejas que encontramos en los alimentos hacen más lento el proceso natural que lleva al daño de los tejidos y las células.
Suplementos
Elegir alimentos ricos en vitaminas y minerales todos los días es la mejor manera para que nuestros cuerpos obtengan lo que necesitan para estar saludables. Sin embargo, muchas investigaciones han encontrado que la mayoría de los adultos no obtienen suficientes vitaminas y minerales en sus dietas.La evidencia sugiere que algunos suplementos pueden mejorar la salud de diferentes maneras. Los suplementos nutricionales como el calcio y las vitaminas B, C y D favorecen la salud de los huesos, la absorción de calcio y previenen el envejecimiento de los tejidos con sus propiedades antioxidantes.
¿Cuándo debemos suplementar nuestra alimentación?
- Deficiencia: Cuando nuestros análisis muestran una falta de ciertos micronutrientes en el organismo. Lo ideal es realizar un chequeo médico anual que le permita a tu doctor determinar tus valores y generar un plan de acción combinando alimentación con suplementos de ser necesarios.
- Edad: Con la edad vamos perdiendo la capacidad de producir ciertas enzimas y absorber de igual forma los nutrientes. A partir de los 40 años es recomendable incluir suplementos como colágeno, vitamina B-12 y vitamina D. Estas ayudan a fortalecer los tejidos, mantienen nuestro sistema neurológico saludable y reducen la pérdida ósea.
- Alimentación especial: Cuando llevamos una dieta especial, por ejemplo los veganos, o cuando tenemos alguna condición alimentaria que restringe el consumo de ciertos grupo de alimentos, suele ser necesario usar suplementos que nos ayuden a mantener en óptimo estado nuestra salud.
- Ejercicio: Cuando realizamos actividad física y tenemos un mayor requerimiento nutricional, por lo que se recomienda consumir suplementos que ayuden a la recuperación muscular y complementen el gasto energético en nuestra dieta.
En resumen
Como todo en nuestras vidas, se trata de obtener un balance. Añadir un suplemento en nuestra dieta requiere entender qué deficiencia alimenticia estamos supliendo y asesorarnos con un profesional de la salud para asegurarnos de que no estamos excediendo la cantidad que nuestro cuerpo puede procesar. Recuerda que cada cuerpo reacciona de forma distinta a los nutrientes que le damos, así que debemos encontrar cuáles son los que nos benefician y se adaptan a las necesidades de nuestro organismo.
Los suplementos son grandes aliados cuando los vemos como un complemento a unos hábitos alimenticios saludables. El principal beneficio de incluirlos en nuestra dieta es asegurarnos de obtener suficientes nutrientes esenciales y mejorar nuestra salud. Pero no todo el mundo necesita tomar suplementos y ciertamente, estos no reemplazan una alimentación balanceada. No hay nada mejor para vernos y sentirnos bien que tener una buena alimentación, ya que el mismo hecho de disfrutar nuestras comidas tiene beneficios a nivel físico y mental.
