¿Qué tanto tiempo le dedicamos a comer? Es decir, a estar realmente presentes con todos nuestros sentidos dispuestos en ese momento. En una vida tan llena de actividades y constantes distracciones, estamos acostumbrados a comer rápido, y frecuentemente realizando otras actividades como ver televisión, revisar el correo o responder mensajes.
Cambiar tu alimentación pasa por cambiar tu relación con la comida de forma gradual. Ir adquiriendo el hábito de una alimentación consciente nos ayudará no solo a cuidar lo que comemos, sino también cómo lo comemos.
La alimentación consciente se deriva del mindfulness. Tener un enfoque intencional en los propios pensamientos, emociones y sensaciones físicas en el momento presente. Incluir esta filosofía de vida a la hora de alimentarnos puede resultar muy beneficioso y traer grandes cambios en nuestra dieta y nuestra relación con los alimentos.
Alimentarse para sentirse bien
Nos alimentamos principalmente para sentirnos bien y estar saludables, no solo para suplir una necesidad. Comer solo para calmar el hambre muchas veces nos puede llevar a no alimentarnos. Generar hábitos que nos permitan estar presentes en todo momento de forma consciente, desde las compras en el súper, hasta qué recetas saludables podemos incorporar en nuestra dieta, nos ayudará a ser más conscientes al momento de llevar los alimentos a nuestro cuerpo.
Establecer un régimen de alimentación saludable y balanceada que nos aporte nutrientes y la energía necesaria para las actividades diarias debería ser nuestra meta. Teniendo eso en mente, podemos organizarnos con un cronograma en los que incluyamos recetas fáciles y rápidas que nos ayudarán a tener a la mano alimentos nutritivos que nos aporten bienestar.
La comida es un combustible
¿Somos conscientes de ello? Hemos escuchado muchas veces que somos lo que comemos y de cierta forma así es. Pero te has puesto a pensar que también comemos lo que somos. Nuestros hábitos alimenticios son un reflejo de quiénes somos y cómo vivimos.
Al cambiar nuestros hábitos y asumir una vida más saludable nos vemos obligados a elegir desde la consciencia nuestros alimentos entendiendo que los nutrientes son nuestra fuente de energía. Mientras le demos a nuestro cuerpo alimentos con mayor contenido nutricional éste se sentirá mejor y más saludable. Si por el contrario le damos comida chatarra a diario y baja en nutrientes nuestro cuerpo cada vez estará más débil, cansado, fatigado.
Amar a nuestro cuerpo es darle los mejores alimentos
Somos lo que consumimos: desde el contenido que vemos, los programas que escuchamos, las personas de las que nos rodeamos. Mantener un balance integral y cuidar cada área de nuestra vida también pasa por poner especial atención en los alimentos.
Darle lo mejor a nuestro cuerpo es un acto de amor propio y ser consciente de ello es el primer paso. Volver a los alimentos naturales, no procesados, como las frutas, vegetales,
hortalizas, cereales integrales, semillas y fibras ayudarán a regular nuestro organismo. Nos harán incluso sentir mejor a nivel emocional al saber que le estamos dando a nuestro cuerpo la atención necesaria.
Nutrirse vs. Comer
Comer no siempre es nutrirse aunque esta debería ser la finalidad. Hoy en día hay gran cantidad de comida lista y fácil en el supermercado con muy poco contenido nutricional. Debemos estar atentos y elegir lo más natural posible.
Hagamos del momento de comer no sólo un acto para nutrir el cuerpo con los alimentos adecuados, tomemos también ese tiempo para nutrir nuestro ser. Conectarnos con los alimentos, despertar nuestros sentidos. Pensar de donde provienen los alimentos y disfrutar de esos momentos nos hacen crear cada vez mayor conciencia y una sana conexión con la comida. Puedes empezar quizás por disfrutar tu desayuno saludable, tratando de eliminar las distracciones, hacer de esas primeras horas de la mañana un ritual en el que te permitas conectarte con el proceso y luego poco a poco ir incorporando otras comidas.
Como todos los aspectos en la vida se trata de alcanzar un balance. Una comida fuera de la dieta saludable de vez en cuando no es el fin del mundo, pero hacerlo de forma consciente también nos hará disfrutar de ese momento sabiendo que luego volveremos a nuestra rutina. Nos alimentamos para nutrirnos en todos los aspectos. Que la comida sea tu alimento y el alimento tu medicina.